jueves, 18 de enero de 2018

Caño Claro una Vereda que sobrevivio a la guerra y hoy renace con alegría




Antes de la agudización  violencia o siempre viviendo en la Guera?:


Hacia 1950 la violencia partidista que se vivía en el país hizo que algunas personas se desplazaran de departamentos como; Cundinamarca, Tolima, Huila y Boyacá hacia el llano, y especificamente a la región del Ariar,  fundando así algunos municipios como El Castillo y el caserío de Medellín del Ariari;  tambien  la colonización  de esta región se dio como fruto de familias que buscaban nuevos horizontes  y tierra para trabajar como lo podemos ver  particularmente  en nuestra vereda, entre ellos:  Ricardo León, José Ríos, Ramón Delgado y Misael Bernal, quienes se ubicaron en la parte baja de la vereda.
Eran personas trabajadoras, que con mucho sacrificio sacaron adelante sus fincas. Los cultivos que se producían aquí daban muy buenos frutos, que luego eran llevados a un sitio conocido como La Reforma, ubicado en el territorio que actualmente hace parte de San Martín – Meta.

Vista del llano desde la montaña. Foto Equipo Misionero Claretiano

Los primeros cuarenta años fueron muy prósperos, ya que la gente era muy emprendedora. Así fue multiplicándose la descendencia de los primeros fundadores y llegando a la vereda cada vez más familias, convirtiéndose en una de las con más habitantes hacia los años 90. Una comunidad que forjó caminos y trochas, construyó su escuela y asi muchos otros aspetos de amnera autonomía ya que era un región olvidada por el Estado Central..

Nuevas épocas de la violencia:


Hacia el año 2000, y luego de la ruptura de los dialogos de paz entre el Gobierno de Andres Pastran y las FARC_EP   aparecieron  en esta zona las AUC, quienes pretendían combatir a las FARC, que antes de su llegada hacian presencia historia  en esta región  región y se empezó a imponer la zozobra en los campesinos. Los paramilitares empezaron a asesinar algunas personas con el pretexto de que estos eran “auxiliadores de la guerrilla”.

En el 2002 fueron asesinados algunos de nuestros vecinos. Personas que nacieron y se criaron aquí, que se dedicaban a trabajar la tierra y a sacar adelante sus familias. Así se marcó el inicio de la violencia, que no dio tregua durante aproximadamente cuatro años y en la cual los campesinos eran los que siempre llevaban la peor parte.

El primero de los que asesinaron fue Héctor Pulido,  el 12 de enero del 2003 a quien sacaron de su vivienda delante de su esposa y sus hijos, luego lo llevaron hacia la parte alta de la vereda en donde lo torturaron y posteriormente lo asesinaron.
El 26 de enero de 2003  fue asesinado LUIS MIGUEL GUTIERREZ,  una de las personas más queridas en la región 

Los Paramilitares hicieron del   30 de Agosto  del 2003  un día  de caravana de la muerte  ya que   asesinaron  RAMON DELGADO RAMIREZ, uno de los fundadores de nuestra vereda Y también asesinaron a  ELIAS FAJARDO. en la vereda vecina de Malavar

 Un 16 de abril de 2004 TEODORO FALLA GARCIA, quien vivía en nuestra vereda y lo recordamos con mucho cariño.

El 30 de abril  de 2004 fueron asesinados ISIDRO BOHORQUEZ,  y NATIVIDAD CASTRO GUTIERREZ, en el patio de su casa, los paramilitares llegaron en la noche y los ultimaron.
 Los paramilitares Tambien asesianron a   Wiliam Sanchez, quien vivian en Medellín del Ariari pero su cuerpo fue arrojado en nuestra vereda. .Además de los asesinatos de estas personas, también enfrentamos la desaparición de Dagoberto Ocampo y Ricardo Lombana.

El 30 de mayo de 2005 JAIME MORENO CHIQUIZA   fue asesinado  por paramilitares,  este  hecho fue  uno de los acontecimientos que más perturbó a la vereda y a muchos en Colombia. A él lo sacaron de su casa y lo llevaron hacia la montaña en la cual fue descuartizado. Quien estuve  presnete an la vereda ese día nos relata lo siguiente:
La muchacha donde vivía Jaime nos avisó que él estaba desaparecido, entonces unas diez personas decidimos ir hasta el lugar conocido como “La ye”, a preguntarlo, allá era donde acampaban los paramilitares, pero ellos negaron que lo tenían y nos dijeron que lo buscáramos por nuestra propia cuenta.

Decidimos regresar y aquí nos encontramos con una persona que decía haber escuchado un tiro en la montaña de los Bernal. Salimos un grupo de personas para allá, en ese momento yo pensaba que iba a encontrar a Jaime vivo o muerto. Pasamos por un monte y unos se fueron por una parte y yo por la otra. De repente me fijé en algo, era tierra removida, entonces les dije ¡muchachos vengan que aquí hay algo como sospechoso! Y se arrimaron donde mí, entonces yo escarbé con la mano y lo primero que saqué fue la manga del pantalón, así que le dije a la muchacha ¿esta era la ropa que llevaba Jaime? Cuando le dije así se puso a llorar.

Empezamos a escarbar y lo encontramos por pedazos, yo los conté y había como 15. Lo último que sacamos con una garlancha fue la cabeza. Al final lo echamos en unas bolsas y lo llevamos al cementerio de El Castillo.
Este suceso fue traumático para la gente que aquí vivía, ya que esto no se había visto en ninguna parte, fue lo más atroz que se haya podido ver en la región.

ALBERTO TAPIAS MORALES fue asesinado en el 2005, el 06 de junio , el había sido desaparecido  días antes, sus padres lo buscaron durante dos día, Alberto vivía en la Vereda la Cima, pero su cuerpo fue hallado en un camino de nuestra vereda.  Este hecho ocurrió 8 días después de la muerte de JAIME MORENO, el ambiente de zozobra y miedo fue grande.

Por esos dias la presencia de la Mision claretiana fue nuestra fortaleza ya que los misioneros venian a visitarnos a pesar de la presencia de los paramiliatres. De hecho el lunes 6 de junio cuando terminamos la misa de novenario de  JAIME MORENO, al salir de la misa nos dimos cuenta que Alberto Tapias había sido asesinado.

A Los 15 día en la capilla de Medellin del Ariari se realizo un misa  de desagravio por la muerte  de JAIME MORENO, Con la presencia del Obispo, ese dia fue un acto de repudio frente a este tipo de asesinatos. Los claretianos fueron nuestro apoyo en estos años donde nadie mas entraba a vsitaros  nuestra vereda

Esta época de guerra también estuvo caracterizada por el fuerte desplazamiento de sus habitantes. Durante los años más difíciles sólo se quedaron aquí Yolanda Falla, Alfonso Lasprilla y Alonso Gómez.  

La escuela fue clausurada, ya que no habia suficientes niños,


Después de la muerte de Jaime, que sucedió en el 2005, se empezó a vivir un nuevo tiempo de tranquilidad, con la desmovilización de las AUC en el 2006 , la vereda empezó a tomar vida nuevamente.

Tras los acuerdos de paz con las FARC

Los acuerdos de paz aunque no han solucionado todos los problemas de marginación, pobreza, falta de tierra para los campesinos, vías y puentes, nos han traído un ambiente de tranquilidad que nos permite dormir tranquilos y salir cada día a trabajar en nuestras parcelas. 

Alborada Navideña 2016 Foto: Equipo Misionero Claretiano

Actualmente hay más o menos la misma cantidad de habitantes que en sus mejores tiempos. Han retornado muchos de sus antiguos habitantes, pero también han llegado nuevas familias, particularmente hacia un sector que aquí conocemos como “las parcelas”.

Hoy hemos podido volver a festejar, a reunirmos, a jugar futbol  hasta tarde de la noche, la escuela se volvio a llenar de niños, de alegria y de gritos de esperanza.  Hoy las parcelas siguen produciendo, Yuca, Maiz, platano, Maracuya, naranja, mandarina, guanabana, manoncillos, mangos, guayaba.


Habitantes de la vereda Caño Claro, peregrinación 2017.

No hay comentarios:

Publicar un comentario